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El elefante en peligro de extinción

En los últimos tiempos han caído demasiados. En África, hace unos 25 años, había más de un millón de elefantes. Desde entonces, los cazadores furtivos han matado la mitad. 

Lo único que querían esos hombres era el marfil. El resto del elefante muerto era abandonado allí mismo.

Robaban los grandes colmillos curvos y los enviaban de contrabando a Extremo Oriente, donde los escultores los transformaban en lujosos adornos. Los traficantes de marfil se enriquecieron sin importarles el destino de los elefantes mientras siguiera habiendo ejemplares en África esperando la muerte.
Con el tiempo, el número de elefantes disminuyó tanto que se aprobó una prohibición mundial de la venta de marfil. Esta medida tuvo cierta eficacia, pero los cazadores furtivos más osados siguieron atacando por las noches y robando a África su mayor animal.
En el caso del elefante asiático, la matanza multitudinaria no es posible porque ya quedan muy pocos ejemplares. El último recuento demostró que había tan sólo 50.000 elefantes asiáticos en todo el continente. Sobreviven en pequeñas zonas remotas de los bosques de la India y Sri Lanka, por Indochina, Malaysia y el sur de China, hasta parte de Indonesia.
 Si entre todos no lo remediamos, cuando leas estas líneas, puedes estar seguro de una cosa: habrá ya muchos menos elefantes en el mundo. Después de millones de años, por culpa el hombre, la era de estos animales gigantescos parece estar llegando a su fin. Hemos tenido mucha suerte de vivir para verlos, maravillarnos con ellos y disfrutar, de su compañía.
 Y recuerda que si te ha gustado toda esta información sobre el elefante, no dudes en compartirlo con tus amistades y familiares o en las redes sociales. También nos puedes dejar un comentario con tu opinión, dudas o preguntas

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